Incendio en el Parque Provincial de la Araucaria causó graves daños a la Biodiversidad
El pasado 19 de agosto, un incendio forestal afectó 5,7 hectáreas del “Parque Provincial de la Araucaria”, ubicado en el municipio de San Pedro.
El área natural protegida, alberga la mayoría de los Pinos Paraná (Araucaria aungustifolia) no implantados en la Argentina. Esta especie fue reconocida como Monumento Natural de Misiones y está catalogada en “Peligro de extinción”, por la UICN (Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza).
En ese marco, el Gobierno de la Provincia a través de la Subsecretaria de Ordenamiento Territorial (SOT) del Ministerio de Ecología y Recursos Naturales Renovables, en conjunto con el Instituto Misionero de Biodiversidad (IMiBio), realizaron un relevamiento para conocer los daños provocados por el fuego; concluyendo que las llamas consumieron un 6% de la superficie del parque y se perdieron 57 ejemplares de Araucarias adultas.
Al respecto, el Dr. Emanuel Grassi, director General Ejecutivo del IMiBio, resaltó que: “En lo que respecta a la pérdida de la biodiversidad, los incendios en nuestra provincia causan graves daños al equilibrio natural de las especies”.
“La biodiversidad es mucho más que un organismo, que una especie, que un individuo. La biodiversidad son años y años de relaciones específicas, de adaptaciones, de cooperación entre los componentes del sistema. Es en este contexto que resulta irreparable el disturbio generado a partir de la presencia de incendios en nuestra Selva Paranaense”, agregó.
Entre las Araucarias conviven especies de aves amenazadas como el Loro vinoso (Amazona vinacea), el Carpintero Cara Canela (Celeus galeatus) y el Coludito de los pinos (Leptasthenura setaria), este último restringido específicamente a los bosques de Araucaria. Asimismo, este ecosistema es el hábitat poblacional del mono carayá (Alouatta guariba). La pérdida de ejemplares de Pino Paraná afecta el normal crecimiento de estas poblaciones afectando el equilibrio natural del ecosistema.
Finalmente, Grassi remarcó que la comunidad misionera debe entender que “cada incendio que vivimos significa producción de menos oxígeno, menos alimento, es menos espacio para la fauna. Es un suelo que pierde especies de microorganismos que nunca conoceremos, cada foco de incendio es pérdida de conectividad, de riqueza y por ende de especies endémicas únicas en el mundo”.
Foto: Gentileza Diario El Territorio